domingo, 8 de noviembre de 2015

La tejeda de Tosande



La ruta desde Dehesade Montejo
Estamos en la montaña palentina. Tenemos casa en Dehesa de Montejo. Desde allí, atravesando la carretera y el puente de ferrocarril, empezamos a recorrer el camino que nos lleva hasta los tejos de Tosande. Supone un recorrido por un camino cómodo de unos 5 km. y lo que quieres echar por el monte, y dedicarle el tiempo que te guste. Es un lugar que invita a relajarse y disfrutar de la paz que nos rodea

En la ruta de los tejos

Tosande es un valle de verdes prados, entre unas laderas de bosques de hayas, defendido por vigilantes rocas que aumentan la belleza del valle.

Puente sobre el río seco
Te asomas a un puente de madera sobre un río seco en este tiempo. Puedes encontrar túmulos megalíticos, huellas de aquellos hombres que habitaron estos lugares hace 4.000 años.



Uno de los tejos más que centenario

Pero su principal joya hoy es la tejeda que se esconde  protegida entre el frondoso hayedo y trepando hacia las cumbres de la montaña.  La excepcionalidad de la tejeda de Tosande se debe por una parte al gran número de tejos que la componen, en concreto hay setecientos cuarenta y tres inventariados. Existen ejemplares que rondan el metro y medio de diámetro. Nuestro compañero intenta medir su circunferencia. Los hay con edades cercanas al milenio.
Ambiente mágico en el bosque de tejos
El ambiente sombrío de la tejeda, junto con sus troncos retorcidos y sus raíces entrelazadas crean un ambiente mágico, alimentado por las leyendas que siempre han existido en torno a este árbol.
los frutos del tejo

 Es agradable observar los rojos frutos del tejo y  cómo de entre el humus del suelo van brotando esos arbolitos que nosotros no conoceremos adultos.

pequeño brote de tejo
Importante conocer la peligrosidad de su fruto y el carácter religioso que por su longevidad le atribuían los antiguos. Consulta en internet.